sábado, 9 de julio de 2016

Reseña: Así es como la pierdes

Alma es de origen dominicano, sueña con vivir en el Lower East Side y tiene un culazo que parece existir en una cuarta dimensión, más allá de sus jeans. Magda es una auténtica nativa de Nueva Jersey: pequeña, con unos ojazos verdes y unos rizos negros en los que te puede desaparecer la mano. Nida es una dominicana de Nueva Jersey con el pelo superlargo, como las muchachas pentecostales, y un busto increíble. Estoy hablando de world-class. Así es como la pierdes es un libro sobre mujeres que quitan el sentido, y sobre el amor y el ardor. Y sobre la traición, porque a veces traicionamos lo que más queremos. También es un libro sobre el suplicio que pasamos después —los ruegos, las lágrimas, la sensación de estar atravesando un campo de minas— para intentar recuperar lo que perdimos. Aquello que creíamos que no queríamos, que no nos importaba. Estos cuentos nos enseñan las leyes fijas del amor: que la desesperanza de los padres la acaban sufriendo los hijos, que lo que les hacemos a nuestros ex amantes nos lo harán inevitablemente a nosotros, y que aquello de «amar al prójimo como a uno mismo» no funciona bajo la influencia de Eros. Pero, sobre todo, estos cuentos nos recuerdan que el ardor siempre triunfa sobre la experiencia, y que el amor, cuando llega de verdad, necesita más de una vida para desvanecerse.

Leí por primera vez a Junot Díaz hace como tres año por una asignación de la universidad, y al verdad es que su novela me encanto, fue sin duda uno de los mejores descubrimientos de ese año, así es que cuando vi tiempo atrás que tenía este libro de cuentos lo puse en lista de espera hasta ahora.

Son once cuentos que giran en torno a relaciones que no funcionan, todas ellas de protagonistas latinos que viven en Estados Unidos. Siendo en algunos casos narradas por hombres o por mujeres, los cuentos se mueven en un ambiente similar, casas parecidas, barrios parecidos y familias parecidas, todos dejando claro esa imagen del dominicano en gringolandia que nunca es parte del sistema donde vive. Hay un montón de estereotipos con respecto al latino, tanto de cómo lo ven los otros a como se ven ellos mismos, lo que no me gusto tanto, ya que no creo que toda la gente de República Dominica tenga tan mala suerte en el amor y pocas proyecciones fuera acostarse con tanta gente como puedan.

Siendo una gran dualidad con respecto al libro, ya que aún no estoy segura de si lo odie o lo amé. En general no me gustan muchos los cuentos, prefiero el formato novela ya que puedo disfrutar y conocer durante más páginas a los personajes, pero el cuento como obra es super especial, ya que en pocas palabras debe decir lo suficiente como para engancharnos y tan poco como para poder cerrar todo en un par de páginas. Las voces de los distintos narradores se parecen bastante en el sentido de cómo piensan y hablan, pero podemos notar claramente que son todos individuos separados. Hay un par de cuentos que se relacionan, el que se abre con Nilda, donde nos muestra al narrador, Yunior, que vive con su mamá y su hermano mayor, Rafa, el cual es lo más genial del mundo, un verdadero dandy latino, el cual ha tenido a infinidad de mujeres en el cuarto que comparte con su hermano. La cosa es que Rafa con su chulerio, sus músculos  y bravuconería enferma: tiene cáncer, leucemia, y las cosas se comienzan a ir en picada. En La Doctrina Pura vuelve Yunior y su hermano, en medio de su proceso frente al cáncer. Me gusto como muestran eso porque en general siento que siempre es como “pucha, pobre” y se ve o desde la víctima total o desde el luchado que vence a la enfermedad y vive feliz por siempre, y es imposible que esas sean las únicas dos opciones, y no lo son. Rafa era mala gente antes, y enfermo sigue siéndolo, sus intentos por rechazar el cáncer, por seguir siendo lo que era y como toda la familia trata de apoyarlo/pararlo es triste, un poco deprimente pero genial. La lucha de alguien muy tozudo en contra de sí mismo a tales extremos es algo sorpréndete, y la forma en la cual está narrada es genial, entre que odias al hermano y lo compadeces, porque él solo está tratando de no perderse en el proceso.

Luego Invierno narra antes de Nilda, cuando Yunior y Rafa eran niños, y al final se termina la historia con Miss Lora, esta vez es cuando este  se encuentra en sus últimos años de adolescencia y después. Las voces que narran cambian, a veces se siento que las historias las cuentan desde adentro, super personal, y otro es casi como un observador externo que no emite grandes juicios.

Los otros cuentos que van de forma independiente son muy buenos, mi favorito fue Guía de amor para infieles, con el que se cierra el libro. Es demasiado tragicómico, porque está este chico nuestro protagonista que esta mega enamorado de su novia, pero su sangre “domo” hace que se fije en otras chicas, así es que un día su novia se da cuenta de que él la había estado engañando no con una, sino con 50 mujeres. De allí su vida se va literalmente por el inodoro. Este chico sufre, sufre porque se va a vivir a otra ciudad donde todos lo miran feo con ser latino, los policías lo detienen para hacer control de identidad por si acaso, sufre porque no puede olvidarla, y luego sufre porque cada vez que encuentra algo para olvidarla, la vida se interpone en su camino para quitarle aquello. Lo encontré muy gracioso por lo tragicómico que es, de verdad, nadie puede tener tan mala suerte durante tanto tiempo, y página tras página vemos lo realmente mal que lo pasa, y como sus intentos son siempre en vano, pero como ese rasgo latino tan marcado hace que las cosas sean menos terribles.

Considerando lo poco “latino” que es Chile (es fome, conservador y frío), fue extraño enfrentarse al prototipo de latino que se percibe en Estados Unidos, pero es parte del estilo de Junot, por lo que luego de leer su novela los cuentos no fueron tan terribles. Si bien prefiero que los libros tengan más acción, me gusto que las historias fueran de gente que tuviera malos romances, pero no porque le mundo era injusto, sino porque ellos son unos idiotas. Me gusto leer la versión del idiota que la cagó, que se da cuenta cuan mal hizo las cosas, y como tiene que vivir con ello. Algunos de los cuentos se desarrollan hace varios años atrás, cerca de 1980 y algo, y otros son más modernos, ya que hablan de facebook y celulares.

El libro es divertido de una forma triste, me reí bastate, rápida de leer  y diferente de lo que suele estar en los top 10, si les gusto recomiendo que lean su primera novela, La maravillosa vida breve de Oscar Wao, es fantástica (a ver si la reseño en algún momento). Y eso, espero que hayan disfrutado del libro y que se animen a leerlo.

Saludos!

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